Las legumbres son un tesoro nutricional, pero para que sean más fáciles de digerir y queden deliciosas, sigue estos pasos:
1. Remojo previo
Déjalas en agua durante varias horas antes de cocinarlas. Esto reduce los antinutrientes y mejora su textura.
2. Cocción adecuada
Empieza con fuego fuerte y luego mantenlo a fuego lento y constante. Añadir alga kombu o especias como comino, hinojo o laurel ayuda a evitar la hinchazón.
3. Elimina los azúcares indigestos
Escurre bien las legumbres antes de cocinarlas y, si usas conservas, enjuágalas bajo el grifo para reducir su contenido en azúcares fermentables.
💡 Truco extra
Si las legumbres te generan gases, prueba añadir jengibre, laurel o hinojo durante la cocción.
5 mitos sobre las legumbres
🔹 Engordan ❌ ¡Falso! Son saciantes y ricas en fibra, lo que ayuda a regular el peso.
🔹 Provocan gases ❌ Solo al principio. Tu flora intestinal se adapta con el consumo regular.
🔹 Solo para el invierno ❌ Son versátiles: disfrútalas en ensaladas, cremas o salteados todo el año.
🔹 No se pueden comer a diario ❌ Al contrario, son una excelente fuente de proteína vegetal.
🔹 Cocinarlas lleva mucho tiempo ❌ Usa legumbres en conserva o cocina grandes cantidades y úsalas varios días para distintas recetas o congélalas.
Con estos consejos, disfrutarás de las legumbres sin molestias y con todo su sabor.


