¡UN GRAN REGALO!

¡Gracias a Madresfera!, la comunidad de blogs de padres y madres en castellano, por la sorpresa.

Desde el 2011, Madresfera se dedica a recopilar y reunir blogs de todo tipo, ideología y condición pero con un elemento común: los niños y sus cosas. Además, ahora también vlogs y podcasts.

Un lugar donde conocer los blogs de madres, y de padres, los blogs de las niñeras, sobre moda infantil, sobre viajes con niños, sobre niños que leen, los blogs familiares, sobre puericultura, sobre cosmética infantil, sobre juguetes, sobre crianza…

Podemos conocer y descubrir blogs, vlogs y podcasts en su web, https://madresfera.com/, seguir las actualizaciones de nuestros blogs preferidos, 💗💗💗anayany.com💗💗💗, en #LaRevista, en Twitter y Facebook, visitar el ranking semanalmente y participar en multitud de eventos, tutoriales, promociones y concursos.

Además, trabajan con las principales marcas del sector poniendo en marcha acciones promocionales con la comunidad, generando así oportunidades para muchas de nosotras como bloggers con campañas y publicidad en sus blogs vía Madresfera Ads.

Por ser “bloggeras” y parte de la comunidad Madresfera nos ha regalado un montón de Caldos Aneto, nuestro alimento básico en Biocultura Madrid 🤣🤣🤣, y solución maravillosa para nuestros viajes el resto del año.

¡Gracias a Aneto y a Madresfera por el regalo! Nos hace muchísima ilusión.

Seguiremos desde anayany.com compartiendo con otros padres y madres nuestras experiencias y si viene con regalito… ¡MEJOR!!!

#anayany
#madreesfera
#caldosaneto

CUIDÁNDONOS PARA CUIDAR

Somos Mamás Especiales así que conocemos perfectamente el concepto de cuidar al cuidador, aunque la realidad diaria es muy diferente. Para poder seguir años y años ocupándonos de nuestros hijos, por supuesto que necesitamos respiros, ocio, mimitos y muchas cosas bonitas. Pero antes de exigirle a los demás (pareja, amigos, Papá Estado,etc.) que nos ayude, somos nosotras mismas las que tenemos que dar ejemplo con nuestros actos y empezar a cuidarnos lo antes posible.

Nuestros hijos serán adolescentes antes de lo que pensábamos y gracias a nuestros cuidados y trabajo llegarán a ser “grandes” adultos muy pronto. Sus necesidades son y serán reales y las nuestras también, así que adoptemos lo antes posible las medidas necesarias para poder cuidarlos durante largo tiempo.

Cuidar de nosotras mismas no es una opción, es vital para poder ofrecer calidad de vida a nuestros hijos a largo plazo.

Por eso debemos tomar medidas desde YA. No saboteemos a nuestro “yo” futuro presumiendo de “superpoderes” que desaparecen con los años y pasan factura a nuestro cuerpo y nuestra mente. Si nos cuidamos desde ahora, todo será más fácil.

– Cuidados físicos. Ser conscientes de que las prisas las tienen los demás y no nosotras, es fundamental. Así que poco a poco y de forma consciente haremos los traslados, cambios de posición, baños, etc. Cuidemos nuestra espalda, rodillas y trabajémonos también nuestra fascia para mantenernos saludables. Intentemos hacer algo de ejercicio físico. Realizar ejercicio de forma pasiva o activa relajadamente, tipo yoga, durante 5 minutos al día, será suficiente para empezar a mejorar la salud. En internet podemos encontrar tablas muy básicas y fáciles. ¡Saludemos todos los días un par de veces al Sol!!

– Vigilemos nuestro descanso. Sentémonos o tumbémonos frecuentemente durante 5 minutos. Esto nos hará recargar las pilas. Creemos nuestro rincón de recuperación. 
Un sueño reparador es sin duda el mejor de nuestros descansos. Ya se que tenemos que cuidar a nuestros hijos también durante la noche, pero en este sentido, es importante adaptarnos a nuestra circunstancia personal y si tenemos que abusar del colecho hacerlo para evitar la falta de sueño que puede traer consecuencias peores: reducción de la atención, concentración, memoria y la mermar la capacidad para organizarnos, irritabilidad, insomnio, etc. Procuremos dormir no menos de siete horas

Asumir una carga de tareas excesiva o no descansar lo suficiente, puede jugar en nuestra contra, produciéndonos cansancio, tensión y nerviosismo elevado que podremos sostener una temporada, pero no toda la vida.

– No descuidemos nuestra alimentación. Una buena alimentación es importante para una buena salud y una mejor calidad de vida. Comer cuando tengamos hambre, evitar las comidas procesadas y llevar una dieta sana, equilibrada y variada, aportará a nuestro organismo todos los nutrientes necesarios para reponer energías y poder realizar todas nuestras tareas. No nos saltemos ninguna comida, sentémonos a comer y comamos de manera pausada. Recordemos que hablamos de muchos años de cuidados.

– Cuidados sociales. Pidamos ayuda no solo a familiares y amigos. También a los profesionales, están ahí para ayudarnos, sobre todo compartiendo la dura mochila de la responsabilidad en temas de salud. No son dioses, son personas y seguro que expresar nuestros pensamientos o reclamar una atención adecuada, acabará siendo gratificante para la larga relación que tendremos. Y si no es la persona adecuada, siempre podemos solicitar el cambio de atención, no estamos aquí para sufrir más por relacionarnos con profesionales apáticos. Y los organismos públicos pueden ayudarnos más con temas de recursos técnicos, Ley de Dependencia, adaptaciones en el hogar, etc. El 1 de abril podemos volver a solicitar la cotización como Cuidadoras en el Hogar, aprovechemos nuestros derechos pensando en el futuro.

– Cuidados emocionales. Meditemos y trabajemos nuestras emociones. Mientras cocinamos, limpiamos, le hacemos la terapia a nuestros hijos en el hogar. Meditar es neutralizar nuestros pensamientos, nuestra mente también necesita descanso. También puede ser útil practicar alguna técnica de relajación, poner música a tope y bailar como locas o hablar con una buena amiga. Aquí estamos.

Cuidar de nosotras mismas es la mejor manera de cuidar a nuestros hijos. No es fácil, pero en algún momento tenemos que empezar, de forma voluntaria o porque nuestro cuerpo nos diga que ya no puede más. Aprovechemos nuestro estado actual.

Por un futuro mejor, trabajemos en un presente consciente.

#anayanay
#vidafeliz
#antifragilidad
#mamaespecialecolcologica

ENERGICEMOS NUESTROS CHAKRAS

Cada día nosotras estimulamos nuestros chakras de una forma u otra, por ejemplo, por medio de los pensamientos que tenemos, o físicamente por medio de nuestros sentidos (olores, colores, texturas…)

A diario energizamos nuestros centros, consciente o inconscientemente, de muchas formas complementarias.

Por nuestros pensamientos. Son una forma de energía. Los pensamientos positivos permiten que nuestra energía fluya libremente y sin restricciones, mientras que los pensamientos negativos disminuyen la energía en nuestro cuerpo. Cada pensamiento (ya sea mental o emocional) está conectado a un chakra. Por ejemplo, un pensamiento apasionado es una energía roja estimulante, pero un pensamiento de enojo disminuye el flujo del pensamiento rojo positivo. Esto significa que un continuo pensamiento de enojo disminuirá la raíz de la energía chakra. Somos los responsables de nuestros pensamientos. Cuidémoslos.

Con la visualización, meditación y respiración. Con el pensamiento, con esa forma de energía, también podemos estimular nuestros centros por medio de ejercicios prácticos como la meditación, visualización o respiración, llevando la energía muy adentro. Son acciones conscientes que alinean nuestros chakras y dejan que la energía fluya libre por nuestro cuerpo.

Por el sol. Es una de nuestras fuentes de energía más importantes. Por medio de la luz, las siete energías de colores fluyen de los rayos del Sol a la Tierra. Las personas, animales, plantas, minerales, agua y nuestros chakras reciben la energía de la Luz del Sol. Saludemos al Sol cada mañana, abramos las ventanas de par en par y expongámonos directamente a los rayos solares con las precauciones ya conocidas, pero sin filtros de ningún tipo: ni cremas, ni gafas, ni cristales que hacen de lupa.

Por la comida. Los rayos del sol dan vida y energía a los seres vivos. La planta absorbe energía que es la misma que brota cuando la ingerimos. Es la energía que contiene esa fruta, vegetal, flor…la que obtenemos a través de la alimentación. Sin esa energía nuestro cuerpo no podría asimilar el valor nutricional de la comida. Balanceemos nuestros chakras diariamente comiendo alimentos con vida, ecológicos, de cercanía para poder asimilarlos y con distintos colores, texturas, sabores, etc.

Con gemas/minerales. Las piedras y minerales también son formas de energía. Los cristales contienen una estructura cristalina que amplifica la energía. Colocar piedras y minerales en nuestro ambiente es una manera simple de absorber las vibraciones curadoras de las piedras y minerales.

A través del agua. Es un gran conductor de energía. Mientras nos sumergimos en agua de mar nuestro cuerpo absorbe su frecuencia y vibración. Mientras nos duchamos podemos balancear los chakra pensando en lo que nos gustaría conseguir de esa específica energía y mejor aún si añadimos aceites esenciales que se relacionen. Y no somos solo lo que comemos, sino también lo que bebemos. Consumir agua saludable hace vibrar a nuestro cuerpo. Invertir en agua saludable es invertir en vida.

Con la aromaterapia. Los aceites esenciales son la pura esencia de las plantas o de las flores. Cada aceite tiene una vibración. Los aceites tienen las propiedades curativas de las hierbas, las flores y las plantas. Usemos solo aceites esenciales ecológicos de calidad.

La música también nos afecta. Ciertos sonidos pueden estimular una respuesta emocional, mental, física o espiritual. Por ejemplo, escuchar o bailar música primaria, como el sonido de tambores, puede energizar nuestro cuerpo físico y estimular nuestro chakra raíz. O escuchar en casa música a 432 Hz o repetir nuestros Mantras favoritos acompañados de hermosas melodías. Podemos hacer sonidos para vibrar a la misma frecuencia como varios órganos en nuestro cuerpo (🕉, campanillas, cuencos, etc.) La contaminación sonora por el contrario puede perturbar nuestro ambiente. Escuchemos los sonidos de la naturaleza que nos hacen felices mientras tomamos el sol y miramos al horizonte.

Con la tonificación de colores. Al proyectar la luz a través de varios filtros de colores las vibraciones de los colores serán absorbidos por nuestra piel, interviniendo en distintas áreas. El Arcoíris, la naturaleza, las flores, los animales nos muestran como los colores son energías.

Por el ambiente material que nos rodea en el hogar. Mantengamos el orden, la limpieza, ventilemos a diario, usemos los colores conscientemente en el ambiente de nuestra casa: almohadones de diferentes colores, cuadros, alfombras, etc., hagamos del silencio el mejor sonido, y del minimalismo una virtud.

Por la ropa. La ropa que llevamos tantas horas nos influencia nuestro animo, mente y nivel de energía. La luz penetra nuestra ropa amplificando la energía del color y los tejidos naturales ecológicos que estamos usando. La piel es el órgano más grande de nuestro cuerpo, tratémosla como si de un tesoro se tratara, a la vez que respetamos el medio ambiente, vistiendo ropas que no hayan provocado vertidos tóxicos, ni con tintes dañinos ni tejidos plásticos-sintéticos. El lino, la lana, el algodón orgánico, la seda, el hilo de flor de loto… son tejidos nobles que no interfieren con nuestros centros de energía.

Con la estimulación adecuada de nuestra fascia. Practicando ejercicio físico consciente (yoga, taichí, etc.) o de forma pasiva estimulando nuestra fascia, el cuerpo llega a su máxima relajación y equilibrio, también a nivel de los centros chakras. Hagamos todos los días una pequeña tabla de ejercicios muy básica buscando la activación energética de nuestro cuerpo, que no nos lleve más de tres minutos en varias repeticiones. Así nuestro cuerpo activará nuestra energía física.

En esencia nuestros chakras reciben la salud de nuestro ambiente, incluyendo las personas con las que tenemos contacto y también nosotras irradiamos una energía de vibración, con la que influimos a los demás.

Por eso para nosotras es muy fácil vibrar con personas que nos dan buen rollo. Los buenos pensamientos vibran de amor infinito. Y que no falte un buen ABRAZO DE OSO para compartir esa vibración superpositiva con los demás💗💗💗

#anayany
#vidafeliz
#espiritualidad

SOMOS UN TODO DE ENERGíA

«El día que nacemos empezamos a morir y hay que saber disfrutarlo» Jose Luis Sampedro.

En el momento de nacer, un bebé tiene en promedio 100.000 millones de neuronas. Es el momento en que el ser humano tiene la posibilidad de ser la mejor versión de la especie humana. A partir de entonces empezamos un viaje en el que vamos perdiendo, no solo neuronas (se crean conexiones pero el número de neuronas disminuye) sino la posibilidad de desarrollar cualidades excepcionales que en pocos meses desaparece. A partir del nacimiento va disminuyendo imparablemente nuestra Energía Vital, está en nuestras manos administrarla de manera correcta.

Los reguladores de nuestra Energía Vital son nuestra inteligencia interna (que no tiene nada que ver con lo que entendemos por intelecto, ésta es intrínseca a la vida) y el instinto del cuerpo por sobrevivir. Ambos dirigen el reparto de energía en nuestro organismo y tienden naturalmente al equilibrio.

Aumentar una función, por ejemplo la de curación, supone la disminución de las demás actividades indispensables (digestión, relación, crecimiento, etc.) o si el cuerpo necesita más energía momentáneamente, disminuye las actividades relacionadas con el movimiento para poder cumplir con los requisitos básicos de supervivencia (respiración, alimentación, eliminación). Un yogui por ejemplo puede pasar semanas sin comer ya que renuncia al movimiento en un estado de profunda meditación sin gastar esa energía, por lo que no tiene que reponerla a través de la alimentación. En el lado opuesto estaría por ejemplo un culturista.

Cuando nuestra energía se reparte de forma equilibrada entonces estamos bien de salud. En el equilibrio está la virtud.

Si algún sistema de nuestro cuerpo nos “roba” más energía de lo normal por algún problema, el cuerpo sabiamente prescinde del buen funcionamiento de alguna otra función, no fundamental, para obtener ese extra de energía consumida. Podemos vivir sin movernos, por ejemplo, pero no podemos sobrevivir sin respirar, beber o eliminar. Así que si necesitamos respirar mejor, hidratarnos más o asimilar nutrientes básicos, el cuerpo se paralizará a favor de la vida.

Trabajemos en evitar ingerir o respirar tóxicos , meditemos para evitar las emociones negativas y expulsemos las unidades de desecho de nuestro cuerpo. Encapsular todos estos problemas en el interior no es buena idea, le estaremos dando trabajo extra a nuestro cuerpo que no parará de intentar eliminarlos, o enfermaremos como resultado de la excesiva acumulación. No le demos más trabajo del necesario a nuestro organismo.

Seamos también conscientes de que optimizar una parte del organismo por separado puede traer más problemas que ventajas. Avancemos en todas las áreas de la vida para tener el menor desgaste por compensación, siendo sabedores de que las funciones energéticas vitales son controladas por nuestra inteligencia interna y no por nuestros deseos.

Cuidemos de nuestro Prana.

#anayanay
#vidafeliz
#antifragilidad

ENTRAMOS EN DOJO


“ Podrán cortar todas las flores, pero no podrán detener la primavera”. Pablo Neruda.

Estamos entrando en la transición entre el invierno y la primavera, energéticamente hablando. 

En España, el indicio de que esta energía empieza a ascender es el florecimiento de los almendros.

La naturaleza es nuestro ejemplo,  y aprovechamos esta energía ascendente para llevar a cabo todas las cosas que nos proponemos.

Empezar un nuevo ciclo, es como renacer, tener una nueva oportunidad de florecer tras un largo invierno.

Lo más difícil ya lo hemos dejado atrás, ahora la energía nos empuja hacia el cielo.

En Oriente estos periodos energéticos de transición entre las estaciones son conocidos como “dojos”.

En japonés, dōjō (道場) significa literalmente «lugar donde se practica la Vía» o «lugar del despertar» y se refiere a la búsqueda de la perfección física, moral, mental y espiritual. Tradicionalmente es supervisado por un maestro de la vía/del camino.

Se trata de un momento de muchos cambios, alteraciones y disfunciones, así que nosotras cuidamos atentamente nuestro cuerpo y nuestra mente para comenzar con fuerza nuestros propósitos en primavera.

Aprendizaje: Vivamos el presente.

#anayany

#vidafeliz

#amorinfinito

#dojo