Mi familia como un equipo de confianza.

 

Cuando en nuestra familia ha surgido una dificultad importante, nos tomamos una pausa.

Al principio resulta duro, pero después nos acabamos dando cuenta de que para que sea sostenible, tenemos que reinventarnos todos los miembros en función de lo que ha ocurrido.

El ser humano es muy emocional. Y esas emociones las tenemos que mostrar a la familia para que el equipo evolucione.

Cuando existe un cambio, surge el miedo a lo nuevo. Y normalmente el miedo paraliza.

Por oposición, la confianza motiva, así que cuando surge un problema nosotros generamos en todo el equipo más confianza para vencer el miedo y poder ser felices.

Para nosotros es importante que todos los miembros estemos abiertos al cambio en distintos campos: en el entorno físico, las costumbres, las comidas, la forma de disfrutar del tiempo de ocio…entendiendo que nuestra familia está viva y cambia con el tiempo.

Nosotros hemos comprobado, por ejemplo, que creando un nuevo entorno, en nuestro caso, es más fácil dar origen a esta nueva circunstancia familiar. Por eso nos encanta cambiar de lugar de residencia.

E igual que trabajamos los cambios de hábitos, trabajamos las emociones: rabia, miedo, felicidad… siendo conscientes y decidiendo cambiar las emociones negativas que van surgiendo por otras positivas.

Gestionamos la situación anímica en equipo y nos dejamos influir por lo positivo, siendo conscientes de que el estado de ánimo perdura en el tiempo, y que nos podemos permitir todos los días de emociones negativas que necesitemos, dentro de una vida feliz.

Al superar juntos el miedo nos sentimos bien creando un nuevo camino.

Por eso somos conscientes de las sensaciones, emociones y acciones que surgen, para ser felices a pesar de las circunstancias, eligiendo ver el lado positivo de las cosas para ser una familia emocionalmente más sostenible.

https://anayany.com/miyoutube

 

Usemos las palabras con amor.

Usemos las palabras con amor no solo para hablar de nosotros mismos, sino de los demás.

Ser impecable con las palabras, no es cuestión de educación, sino de hablar con integridad.

Digamos solamente lo que queremos decir, y utilicemos el poder de las palabras para avanzar en la dirección de la verdad.

Mucha gente habla pestes de cualquiera, y utiliza las palabras como una especie de exposición pública de las supuestas vergüenzas ajenas. Nadie se salva en esas charlas, a veces ni los presentes. Pero solo un alma ingenua puede dejar de imaginar que las mismas flechas venenosas serán lanzadas sobre el resto de las cabezas apenas tengan ocasión. Como no somos perfectos, siempre la persona con baja autoestima encontrará una víctima a la que difamar o criticar desde su parcialidad.

Así que utilicemos las palabras apropiadamente. Es bonito ser conscientes y emplear las palabras para compartir, no para destruir.

Cada uno demuestra con lo que dice, lo que es.

Y no se trata de ser culto o leído o un monje budista. Se trata de que las palabras lleven verdad, alegría y amor.

Porque una buena palabra genera un buen pensamiento y una acción positiva.

Hoy escribimos este post como apoyo a Sara Rodríguez Martínez.

Sara es una de tantas personas que dedican su vida a ayudar a los demás, en este caso a personas que necesitan apoyo en muchas cosas, por ejemplo en el aseo personal.

“Estoy cansada de tener que escuchar: “que trabaje aunque sea limpiando culos”; como si esta profesión fuera lo último a lo que una persona puede recurrir y careciera de valor (…) Yo por ejemplo no podría trabajar en algo que me exigiese mentir, como un banquero o algo por el estilo”.

GRACIAS a Sara y todas las “Saras” del Mundo. Usemos las palabras para sumar y agradecer.

Por cierto, a mi también me encanta “limpiar culos”?

https://anayany.com/miyoutube

#anayany
#vidafeliz
#serfelizapesardelascircunstancias

Vive de corazón

 

Sólo se puede elegir entre dos caminos en la vida: el camino del amor o el camino del miedo.

Y según el camino que elijas podrás disfrutar de una vida PLENA.

Realmente te das cuenta de que estás en el camino correcto cuando eres libre de escoger el camino. No lo escoges por obligación, ni por dinero, ni por llegar a lo más alto, ni porque no queda más remedio.

Lo escoges porque eres feliz, a pesar de todas las dificultades y después te das cuenta de que mucha gente maravillosa ha escogido el mismo viaje.

Cuando estás en el camino correcto tienes el “superpoder” de ver el otro camino, ves el camino que está al lado, por el que van pasando personas como si fuéramos por dos cintas automáticas paralelas de un aeropuerto.

Por el otro camino pasa gente con vestimentas muy llamativas, gente con prisa, gente que habla mucho, y muy alto, gente que parece huir, gente que se ríe de los que vamos tranquilamente por la otra cinta, gente que piensa que esa cinta le va a llevar a su éxito individual, o a la solución, gente que ha sacrificado los valores y lleva una vida personal difícil.

La cuestión es que tú caminas pausadamente, te paras a mirar los escaparates, hablas con los demás pasajeros, lees un buen libro, llevas poco equipaje y disfrutas del paisaje por los grandes ventanales.

Y cuando llegas a la sala de embarque, sonríes a la azafata de tierra, bromeas, bebes de tu botella reutilizable de agua y te relajas hasta la hora de embarcar.

Mientras observas a algunos de los pasajeros que iban por la otra cinta corriendo, estresados, ves como siguen nerviosos, discuten con la azafata y son incapaces de sentarse un ratito.

Los dos vamos a coger el mismo avión, pero desde luego la experiencia no va a ser la misma. Supuestamente los dos vamos a llegar al mismo sitio, pero desde luego no de la misma forma. Todos sabemos que tenemos el mismo final, pero no todos vivimos la vida de la misma manera.

Por razones culturales, pasamos en nuestras vidas por esos momentos en que no disfrutamos del viaje, ni del trayecto ni de la experiencia…El Sistema Educativo, un trabajo tradicional, la familia, las obligaciones, etc.

Por desgracia muchas veces es el sufrimiento lo que nos hace cambiar de camino. Porque el camino del miedo es muy estresante. En la vida la fortuna no es lineal, tenemos experiencias de todo tipo. Si pasas los días estresado, no te paras a disfrutar, no compartes con los demás y la ambición te ciega, aunque aparentemente no te falte de nada, el miedo es tu cárcel. Soportarás la vida, pero no la vivirás.

El camino del amor sin embargo es muy bonito. No tiene porque ser fácil, pero has elegido conscientemente hacerlo placentero, aunque los baches los tengas que pasar sin saber a veces cómo. Llorarás, gritarás y te caerás, pero el amor te volverá a levantar. Te rodearás de un Mundo bello, lleno de sonrisas, cariño, empatía, simpleza y compasión, y lo difícil lo convertirás en rutina de amor.

Eres tú quien tiene que elegir.

Puedes elegir parar, ser consciente y coger el camino del amor.

O que te pare la vida de una forma u otra, para que despiertes y abras los ojos.

Tu eliges: vivir desde el amor consciente o desde el miedo de una vida impostada.

No busques fuera la respuesta a tus problemas. Simplemente elige el camino del amor hacia ti y hacia los demás.

Inocentes de corazón, supervivientes por elección.

Para nosotras es muy importante ser conscientes y seguir los propios dictados internos y no solo los de los demás, porque esto nos hace libres y poseedoras de nuestro destino.

Siempre he tratado de evitar ser una simple marioneta de cualquier tipo de “autoridad”, porque confío en nuestros propios recursos internos. Nosotras hemos pasado de pacientes a actuantes, de educandas a aprendices y de buscar el mejor puesto de empleado a artífices de nuestros sueños.

Me di cuenta de que el mejor currículum no se conseguía en la formación reglada, sino con las experiencias vividas y los momentos seleccionados meticulosamente.

Mis Maestros en realidad nunca han sido los Profesores sino personas con experiencias vitales que les han llevado a donde están. Personas que aportan tanto que sólo al sentirlas u oírlas hablar, el mundo se para. Personas que poseen esa VERDAD que no puede remediar quien no conoce la mentira. Se que sufren porque nosotras hemos sufrido, y lloran y se enfadan, y por eso nos gustan. Porque son Maestros de la Vida que nos hacen crecer día a día.

Ellos no quieren ni nuestro tiempo, ni nuestro dinero… Y yo he elegido para siempre ser aprendiz de su generosidad y genialidad, fiel a mi sueño.

Cuando tienes delante de ti a UN NIÑO que ha desafiado a la muerte y que avanza hacia la salud con una sonrisa de oreja a oreja, sin protestas, quejas ni intereses, sólo porque ha escogido el camino de la VIDA, ves como los llamados Maestros, se convierten en alumnos de primero.

Un abrazo y gracias por mantener vivo lo que define a la raza humana.

Gracias hija.

https://anayany.com/miyoutube

#anayany
#vidafeliz

«Los mejores cuentos de China» de Ramiro Calle

«Los mejores cuentos de China» es un libro corto, ameno y que invita a la reflexión.

En él se relatan cerca de un centenar de cuentos cortos, tomados de los viajes del autor, Ramiro Calle, por los países asiáticos.

Estos cuentos contienen lecciones espirituales de gran valor, que normalmente son transmitidos de monjes a discípulos, a modo de condensación de las enseñanzas.

Beben de tradiciones orientales, como el taoísmo o el yoga.

Todos podemos aprender de estos cuentos y extraer de ellos algo de sabiduría para la vida cotidiana.

Se incluye, tras cada cuento, una reflexión del autor que condensa y clarifica el significado, para que podamos empezar desde ya mismo a aplicar la filosofía de meditación, quietud mental y ecuanimidad compasiva que transmiten estas bellas narraciones.

Tal y como dice el propio Ramiro Calle en la introducción: “El cuento se convierte de este modo en tema de reflexión consciente y lúcida, así como de meditación, esto es, en magnífico soporte para desarrollar un tipo de comprensión más profunda e intuitiva y que coopera en la evolución y el despertar de la conciencia”.

«Los mejores cuentos de China» es una antología de relatos para leer, releer y hojear de vez en cuando, pues no hay cuento que no ayude a esclarecer algo (ya sea de nosotros mismos, del mundo o de la Inteligencia Universal).

Imprescindibles para los amantes de cuentos espirituales: Ramiro Calle y  Jorge Bucay.