LA IMPORTANCIA DE COMPARTIR EL AMOR.

«No le compres flores a tu pareja. Ayúdala a que florezca». Anónimo.

Por Any Pascual.

Para mi, existen cuatro tipos de amor, los mismos que definían los griegos en la época clásica: Eros, Storgé, Philia y Ágapé.

Eros

Eros representa el amor pasional y erótico. En la mitología griega, Eros es el dios que simboliza el amor romántico, la pasión e impulsividad. Puede ser el primer paso para llegar a un amor más profundo y duradero si se sabe canalizar su intensidad.

Este tipo de amor se caracteriza por experimentar la atracción física, sexual e instintiva. Se relaciona con el amor efímero, el que se genera al principio de la relación e idealiza el momento mezclando el deseo y atracción sexual.

Storgé

Los griegos clasificaron como Storgé al amor fraternal, amistoso y comprometido. Es un amor que se crece a lo largo del tiempo y se relaciona con las relaciones familiares y de amistad, por ello se caracteriza por ser un amor leal e, incluso, protector.

Storgé es un amor que implica tiempo, que las personas emplean para conocerse y, gran compromiso. A diferencia del amor Eros, este no es pasional ni impulsivo y se puede dar entre personas o personas y otros seres vivos.

Un ejemplo de este tipo de amor es el de una amistad que se ha ido construyendo poco a poco a través de los años y en la cual se destaca el compromiso y lealtad de los amigos. También se puede mencionar las demostraciones de cariño entre padres e hijos.

Philia

Se denomina como Philia al amor que existe entre amigos, el amor al prójimo que busca el bien común y se expresa a través del respeto, solidaridad, cooperación, compañerismo. Se dice que es uno de los amores más bonitos que existe.

Philia es un amor que se caracteriza por ser desinteresado y que se basa en el compañerismo, que te alegra cuando el otro es feliz y está bien. No involucra un amor pasional ni atracción sexual.

Ejemplo de Philia son aquellas amistades de vieja data, leales y comprometidas en las que muchas veces se comparte más tiempo con los amigos que con las parejas, sin que eso indique otro tipo de amor que no sea el fraternal.

Ágape

Los griegos denominaron como Ágape al amor más puro e incondicional que existe. Se refiere a un amor que nutre, generoso, consciente de sus deberes, un amor espiritual y profundo cuya prioridad es el bienestar del ser amado.

El amor Ágape se caracteriza por ser universal, es decir, es el amor que se tiene a una persona, animal, naturaleza… No es pasional, incluso, quienes aman de esta manera están dispuestos a apartarse de la relación por el bien del ser amado, se rinde si es necesario.

El amor Ágape no busca su placer propio, al contrario, encuentra satisfacción al dar amor. Por ello, es considerado como un amor sensible, tierno, cuidadoso y amable.

Y aunque todos son diferentes entre sí, muestran cuán variadas pueden ser las relaciones de una persona, y que todas ellas tienen el potencial de aportarnos algo y ser saludables.

Hay algunas personas a las que les cuesta mucho trabajo decir lo que sienten. Otras lo dicen solo en momentos puntuales. Esto está perfectamente bien, es parte de la evolución de cada uno. A un gran porcentaje nos gusta que nos demuestren el amor, cada vez que sea sentido. Cada vez que alguien simplemente se sienta amando a otra persona, o se encuentre a si mismo pensando “amo a esta persona y doy gracias porque esté en mi vida”.

En las últimas generaciones la frase “te quiero” ha adquirido otras connotaciones, diferentes significados y contextos. Por eso a mi me gusta decir «te amo».

Decir “te amo” como una manera de solucionar conflictos, de despedirse, de saludar, o simplemente de mantener una conversación, crea un buen ambiente, y es mejor cuando lo decimos de corazón, sintiendo lo que esas palabras, amar a otra persona, significan verdaderamente para nosotros.

La mayoría de las veces, no se necesitan grandes gestos, regalos, o cosas así, pese a que siempre vengan bien, basta con un sencillo “te amo” dicho desde el corazón, con las miradas conectadas y una sonrisa franca. Ese es el mejor presente que podemos darles a las personas que están en nuestro corazón.

Yo me he propuesto mostrar el cariño y el amor sincero que siento por mi familia diciéndoles “te amo” sin reservas, sin segundas intenciones y con el corazón abierto.

Me reté a mi misma a decirlo muchas veces al día. Primero como un juego, pero luego con un trasfondo más profundo.

Aprendizaje: Lo más importante es que lo más importante sea lo más importante.

#anayany
#amorinfinito
#vidafeliz

CONFIAR EN CADA MOMENTO

Por Any Pascual.

«Ve con confianza en la dirección de tus sueños. Vive la vida que has imaginado». Henry David Thoreau.

Es importante mantener la confianza siempre, pues es la manera de, al fin, materializar lo que visualizamos. Confianza en nosotros mismos, confianza en nuestra visión, confianza en los demás, y ante todo confianza en la vida.

La confianza solo es fácil de lograr cuando estamos en un estado de conciencia elevado; cuando amamos.

En caso de que nuestras vidas estén llenas de lo opuesto al amor (el miedo), la confianza puede resultarnos esquiva, pues es lo que se desprende de un estado de paz.

Para confiar, primero tenemos que conocernos a nosotros mismos conocer nuestra visión, conocer a los demás y conocer la vida. Y, a veces, ese es un proceso doloroso, que siempre reporta mejores resultados, como la oruga que pierde su identidad en la crisálida para transformarse en mariposa.

La confianza, ante todo, independientemente de los resultados, nos hace sentir bien. Nos llena de una vibración poderosa, de apertura. 

Confiar es un paso vital en cada camino, cuando visualizamos lo que queremos, cuando lo verbalizamos y, más aún, cuando damos el llamado “salto de fe” (que tiene ese nombre porque es como saltar de un avión con plena confianza), cuando “salimos del caparazón” y nos encontramos con la incertidumbre porque hemos decidido vivir fuera de la zona de confort y actuar. 

Muchas veces no es fácil simplemente dejar ir los deseos, los “debería ser”, los “tengo que hacer esto, y esto también, y lo otro” (para conseguir nuestros objetivos). A veces, confiar se vuelve complicado, una locura o algo que nos da un tremendo miedo.

Pero al final, cuando ya no nos queda otra alternativa, acabamos confiando, porque eso es lo que la Vida quiere para nosotros (que confiemos en ella, que soltemos el control y el ego) y para eso normalmente nos pone pruebas cada vez más duras.

Aunque no siempre es así. De vez en cuando, simplemente algo en tu mente (o más usualmente en tu corazón) hace click y confías en el discurrir amoroso de las cosas, sin más explicación. Confías, y punto.

La confianza nos ayuda a movernos a través de las dificultades con esperanza.

Como ocurre con la meditación, cuanto menos tiempo queramos (porque es algo que queremos hacer, incluso en el trabajo podemos estar confiados) dedicar a confiar, cuanto más nos boicotee el ego y menos dispuestos estemos a dejar lo que deseamos en manos del Universo, más necesario es confiar.

Tarde o temprano (más temprano cuanto más confiemos en nosotros, en nuestra visión, en los demás y en la fuerza que nos guía) la Vida nos ayudará con nuevas oportunidades, con señales, encubiertas para que a quien no esté preparado le parezcan casuales cuando son causales, y será decisión nuestra (gracias al libre albedrío del que todos gozamos) si aceptarlas, si aprovecharlas, o no.

Confiemos, simplemente confiemos. Porque si vivimos nuestras vidas aunque sea con un 1% más de amor, de paz, de consciencia… de confianza, que de miedo, algo más poderoso nos dará todo lo que siempre hemos buscado, y también nuestros deseos puntuales.

Ah, por cierto. Yo recito una oración cada día, que esencialmente se puede resumir en lo siguiente: “Les pido su protección, su amor, su apoyo, su ayuda, sus bendiciones, sus dones, la capacidad para canalizarles y recibir los mensajes que deseen y puedan darme, su Vida y lo que aportan a la vida, y unas buenas condiciones para vivir y escribir” (con más detalles, es un resumen). Y luego procedo a nombrar a quienes va dirigida, porque los nombres tienen poder.

Cuento esto porque es algo que hago absolutamente todos los días desde hace meses y me ayuda a sentirme confiada en lo que hay más allá de mí y de este plano físico.

#anayany

#amorinfinito

#salutogénesis

HABLAR DESDE EL CORAZÓN

Las palabras son poderosas.

Son una puerta a una realidad.

Y cuando las pensamos, más aún cuando las decimos, es como si abriésemos esa puerta y la cruzásemos, empezando a vivir en un Mundo distinto, a veces en pequeños detalles y en ocasiones diferente, en cosas importantes.

Es importante cuidar los términos con los que nos referimos a la realidad, porque ese es un paso en la creación de nuestras experiencias.

Justo por eso hay tantos libros, tantos audios… y tanto arte basado en las afirmaciones positivas.

Tal vez, quizás, afirmando “el Mundo es genial”, el Mundo no cambie por sí mismo para adaptarse a lo que nosotros consideremos maravilloso, pero sí que nuestra atención estará más enfocada durante todo el día en las cosas que amamos, las cosas que hacen que pequeños micro-mundos, como el momento del atardecer, sean perfectos para nosotros.

Mucha gente desconoce el poder que tiene lo que dicen, y andan por la vida quejándose, hablando desde la carencia, el miedo y el ego. Si no hacen algo para cambiarlo, eso que piensan y a lo cual dan forma con palabras, se creará en su vida.

Es importante hablar desde el corazón, desde el sentimiento de amor, desde la abundancia, para crear eso en la vida.

Cuando hablamos desde la confianza, incluso aunque desconfiemos de algunas cosas, estamos centrándonos en los detalles de los que estamos seguros, y por ende crearemos más detalles de los que estar seguros, y nuestra vida se llenará de calma, porque confiaremos, poco a poco, a través de un proceso, en todo lo que existe.

Al hablar, pensemos: ¿Es lo que nuestro corazón diría si todo fuese amor?
Si es así, digámoslo, ya que estaremos expresando lo que verdaderamente somos.

#anayany
#amorinfinito
#vidafeliz

VISUALICEMOS PARA CREAR por Any Pascual.

“¿Hay algo previsible? Cuando nada es seguro…¡TODO ES POSIBLE!” Alicia Sánchez.

La visualización se fundamenta en dos cosas, que también son los pilares esenciales para ser feliz, sean cuales sean las circunstancias: el amor y la quietud de la mente.

Es cierto que también se puede visualizar sin quietud y desde el miedo. De hecho, así es como lo hacen la mayoría de personas en casi cada momento de su vida: visualizan las contingencias, los problemas y las cosas que pueden salir mal.

Nosotras hablamos de la otra visualización: la visualización creativa y positiva.

Esta es la visualización que los que conocemos el poder de la mente utilizamos para crear las circunstancias que deseamos en nuestra vida.

Realmente hay muchos métodos para visualizar saludablemente, pero todos se basan en el amor y la quietud.

Por eso la actitud meditativa es un primer paso para poder visualizar. Cuando meditamos calmamos la mente y en silencio nos conectamos con algo que nos llena de poder. Ese poder lo usaremos luego para crear lo que hayamos visualizado.

El amor es otro pilar porque gracias a él logramos vivir una vida agradable y agradecida.

El Universo no sabe, y que conste que la mente tampoco, distinguir entre un pensamiento negativo y otro positivo; “quiero esto” y “quiero aquello”, no hacen ninguna diferencia en lo que creación se refiere. Si decimos: “no quiero salir de viaje”, nos estamos enfocando en viajar. Y eso es lo que conseguiremos. 

La emoción, sobre todo si es el amor, es lo que determina si un pensamiento llegará a la realidad o se mantendrá en el estado mental. 

Decir: “Será un gran día hoy”, antes de abrir las ventanas o subir la persiana por la mañana, solo lo crea si lo llenamos de emoción. En caso de que lo digamos sin una implicación emocional, apáticamente, como si no nos importase, se quedará sin ser manifestado.

La visualización es poderosa. Con unos buenos aliados puede crear lo que sea. Sin ellos su poder se queda fútil. 

Hay miles de herramientas para ayudar a la visualización en el proceso de llevar al plano físico lo que pensamos. Collage con fotos de lo que deseamos, un escrito que podemos leer de cómo será nuestra vida una vez se haya manifestado, y muchas otras cosas.

Pero como ya he dicho, los pilares son el amor y la quietud. Si mantenemos un amor desde el alma que nos llene y nos dé confianza y permitimos que los únicos pensamientos que lleguen a nosotros sean de fe, de la seguridad de que lo vamos a lograr, no necesitaremos nada más para crearlo. 

Visualizar es crear, a través de nuestra mente, lo que nuestro corazón desea y lo que nuestra alma nos susurra.

#anayany

#amorinfinito

#vidafeliz

LA EXPERIENCIA DEL SER CUIDADO.


Lo que yo quiero expresar en este escrito es la importancia que tiene salir de la coraza, quitarse la máscara y aceptar que otros nos vean tal y como somos: seres humanos imperfectamente perfectos.

Hay personas que, por endurecimiento de su carácter o por experiencias de la vida, no se dejan cuidar. Estas personas consideran que pueden hacerlo todo solas, que no necesitan a nadie y que son su propio hombro sobre el que llorar, si es que necesitan alguno, lo cual no quieren admitir. 

A esas personas, que están alejadas de su esencia, les cuesta permitirse ser cuidadas. Por eso nunca serán cuidadoras conscientes, porque creen que nos tienen que cuidar a los demás sin cuidarse ellas. Y todos somos a diario cuidados y cuidadores.

La relación que hay entre la persona cuidada y su cuidador debe ser una relación consciente, desde la fragilidad de una de las partes, dependiendo del día. Fragilidad física, pero también en algunos casos, psicológica, emocional y a veces espiritual. Aunque el término frágil ha acabado teniendo unas connotaciones muy negativas, que le han dado esas personas que no se quieren dejar cuidar. 

La fragilidad simplemente es una situación positiva. Para mí significa apertura, mostrar en verdad quién eres, sin tener que protegerte con falsas identidades para que no te hagan daño. Significa abrir el corazón. De la fragilidad nacen siempre las mejores creaciones, y una de ellas, maravillosa, es la relación entre un cuidador y la persona cuidada.

Cuando el ser cuidado abre su corazón con fragilidad, es posible que el cuidador, por reflejo y por espejo, abra su corazón también para responder al amor, que emana de la sencillez que resulta cuando nos salimos del personaje. Por eso sé que existe también el sentido contrario en el viaje.

Si ambos lados de la moneda, el cuidado y el cuidador, abren su corazón al mismo tiempo y se muestran tal y como son, también con momentos frágiles, sucede la auténtica magia. En los momentos difíciles es cuando se puede ver si ambos nos permitimos ser quienes somos, nosotros mismos.

La sinceridad también es importante en una relación de cuidador y cuidado. La persona cuidada, cuando comunica de una forma u otra cuántas atenciones necesita y de qué clase, en qué tiempos y con qué estado de ánimo, está siendo sincera. La persona que cuida, cuando ama al ser cuidado y expresa con caricias, con abrazos, con atenciones o con palabras cuanto tiene para darle, está siendo sincera.

En caso de que uno de los dos no logre comprender desde el corazón y solo lo haga desde la mente, algo no está siendo sincero.

Una persona, cuando es cuidada de un modo positivo, pleno y desde el absoluto amor, siente ese amor y esas atenciones muy hondo dentro de su alma; y las multiplica, enviándole al cuidador muchísimo más amor en respuesta.

Los seres humanos nunca olvidamos a las personas que nos han cuidado sinceramente, no porque necesitasen demostrar que eran buenas personas o porque sintiesen lástima de nosotros, sino porque nos respetaban y admiraban como otras personas tan válidas como ellos. Nunca las olvidamos porque eso ha marcado nuestras vidas, quienes somos.

Sentirse cuidado desde el absoluto amor es una experiencia transformadora porque se vuelve algo muy personal.

Para mí la experiencia de ser cuidada se basa en ser comprendida y en ser aceptada. Se basa en que el cuidador comprenda en un nivel profundo aquello que estamos pasando, lo que estamos sintiendo, pensando y lo que necesitamos. 

Y en la aceptación de entender que nuestras circunstancias son nuestras (pero no somos así por ellas) y que somos seres humanos llenos de amor que también tiene, aparte de la naturaleza de su condición, defectos y virtudes.

Ser cuidado es ser amado y es amar, es ser comprendido y es comprender, es ser aceptado y es aceptar. 

Cuidar y ser cuidado es vivir.

#anayany
#amorinfinito
#vidafeliz
#diamundialdelcuidador
#cuidadoras